viernes, 30 de enero de 2009


Dicen que una de las enfermedades más nefastas que existen en el mundo es el corazón roto. Las heridas causadas no se ven, pero el dolor que conlleva es algo difícil de sobrellevar durante el paso de los años.

La mejor manera de curarse es recoger los pedacitos que se han esparcido al compás del viento, es el momento en el que se ha de asumir lo sucedido y recomponer los gajos de vida de los que te han despojado.

Lo peor llega cuando te das cuenta de que en el mCursivaomento de ajustar los trocitos te falta uno, es entonces cuando reaccionas y asimilas que esa historia aun no ha terminado y que aquél que una vez te rompió el corazón a pedazos, se ha llevado una pequeña parte consigo que le pertenecerá para siempre.





Imagen: Las bailarinas azules (Degas)







Saludos

sábado, 24 de enero de 2009

aloha!

Parece ser que ya he caído en todas las tentaciones internáuticas (o como se escriba) habidas y por haber...me dejaré caer por aquí para exprimir mi cerebro y plasmar mis "autocreaciones literarias" siguiendo el curso de mi estimada amiga Guio "haz literatura por ti mismo" que ayuda a expresar lo que sientes de la forma más bella posible.



Saludos